En el ámbito del procedimiento concursal de la sociedad Hermanos Santana Cazorla SL, que actualmente se encuentra en el estadio de liquidación, participan catorce acreedores. Este grupo incluye no solo diversas administraciones públicas, sino también entidades financieras y empresas del sector turístico, así como compañías de otros ámbitos y particulares. La cifra de la deuda reconocida hasta este punto supera los 200 millones de euros, según diferentes fuentes relacionadas con el desarrollo judicial de este caso. Además de esta suma, se deben considerar al menos 80 millones de euros en la quiebra de Mar Abierto, que gestiona los hoteles del grupo Santana Cazorla en Taurito.
Como se había informado anteriormente, el Juzgado de lo Mercantil número 1, situado en Las Palmas de Gran Canaria, decidió el 31 de mayo proceder con la apertura de la fase de liquidación y la disolución de la empresa, dada la falta de un acuerdo de acreedores en el plazo estipulado. La lista de los acreedores incluye, entre otros, a Isla Marina, el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), Banco Sabadell, la Mancomunidad Residencial Pino II, y varios particulares como María de los Ángeles García y Pablo Rafael Borras. Banco Sabadell También figuran la Agencia Estatal de la Administración Tributaria y la Comunidad Autónoma de Canarias en este listado.